LIBROS: La derrota de Occidente, del ensayista francés Emmanuel Todd

El pasado mes de enero se publicó en Francia, «La Défaite de l’Occident» (La derrota de Occidente, aun no traducido al castellano) del antropólogo y ensayista francés Emmanuel Todd, autor de decenas de libros y artículos científicos. Todd ganó notoriedad con la publicación en 1976 de «La chute finale» (La caída final: Ensayo sobre la descomposición de la esfera soviética, edición en castellano), obra en la cual anunciaba el colapso de la URSS a partir del estudio de datos estadísticos.

En una entrevista en Le Figaro con motivo de la publicación de «La Défaite de l’Occident», Todd explicó los tres factores en que se basa su pronóstico.

Todd considera que es un mito que EEUU tenga el primer PIB del mundo, porque está sobrevaluado, basado sólo en la renta petrolera y las cinco grandes empresas tecnológicas estadounidenses (Google, Amazon, Facebook, Apple y Microsoft), y fundamentalmente compuesto por «servicios personales cuya efectividad o incluso utilidad no siempre se discierne […] abogados sobrepagados; financieros predadores; guardias de prisión; agentes del servicio de inteligencia».

Todd aclara que «este análisis del elemento religioso no denota en mí ninguna nostalgia ni deploraciones moralistas: es una constatación histórica». El protestantismo había producido un alto nivel de educación, sin precedentes en la historia de la humanidad, la alfabetización universal, porque exigía que cada creyente pudiera leer las Sagradas Escrituras por sí mismo. Además, indujo una ética del trabajo, una fuerte moral individual y colectiva. El reciente hundimiento del protestantismo ha desencadenado una decadencia intelectual, una desaparición de la ética del trabajo y una codicia masiva (de nombre oficial: neoliberalismo), explica.

En este punto Todd habla de la guerra en Ucrania, y de guerra mundial. «Militarmente, lo peor está por llegar para los ucranianos y Occidente. Rusia quiere probablemente recuperar el 40% del territorio ucraniano y lograr un régimen neutral en Kiev. Y en nuestras pantallas de televisión, justo cuando Putin afirma que Odessa es una ciudad rusa, seguimos oyendo que el frente se está estabilizando».

Estados Unidos, por su parte, tratará de enmascarar la derrota llevando la guerra a un punto muerto, a un estancamiento, a un conflicto congelado, pero los rusos no lo aceptarán, concluye.

El ensayista señala que «la negativa occidental a pensar en la estrategia rusa, en su lógica, sus razones, sus puntos fuertes, sus limitaciones, ha conducido a una ceguera general». Para Todd, los rusos son conscientes no sólo de su inmediata superioridad industrial y militar, sino también de su futura debilidad demográfica. «Sin duda, Putin quiere alcanzar sus objetivos bélicos ahorrando hombres y tomándose su tiempo. Quiere preservar lo que ha ganado en la estabilización de la sociedad rusa. No quiere remilitarizar Rusia y se preocupa por continuar su desarrollo económico. Pero también sabe que llegan clases demográficamente vacías y que el reclutamiento militar será más difícil en los próximos años (¿tres, cuatro, cinco?). Por lo tanto, los rusos deben acabar con Ucrania y la OTAN ahora, sin permitirles ninguna pausa. No nos hagamos ilusiones. El esfuerzo ruso se intensificará».

En cuanto al tema de acabar con la OTAN, al principio del conficto militar ruso-ucraniano, Emmanuel Todd pronosticó que con la derrota de Ucrania, llegaría el fin de la OTAN y con ello, la paz mundial.

Una nota publicada en el digital francés Polémia bajo el título » ‘La derrota de Occidente’ de Emmanuel Todd: un análisis brillante e inquietante», explica que el libro presenta a un EEUU en un estado avanzado de colapso social: «La implosión, en etapas, de la cultura de WASP-blanca, anglosajona y protestante desde la década de 1960 creó un imperio privado, una organización esencialmente militar dirigida por un grupo sin cultura -en el sentido antropológico- que no tiene más valor fundamental que el poder y la violencia». Para Todd -señala la nota de Polémia- la sociedad estadounidense ha perdido los valores que constituyeron su fuerza: ética individual, sentido del trabajo y esfuerzo colectivo. Para Emmanuel Todd, sólo hay una oligarquía que «reina sobre una economía en descomposición y en gran medida ficticia».

A este nihilismo del poder estadounidense en un mundo que ya no es unipolar, Emmanuel Todd, opone el realismo de Rusia, un verdadero Estado nacional que aún razona en términos de poder: geografía, recursos, población y tiempo, y que ha logrado enderezar y estabilizar su poder desde la llegada de Vladimir Putin.

Todd -explica Polémia- demuestra la recuperación de la economía rusa y también su recuperación social al analizar datos demográficos como la mortalidad infantil, la tasa de homicidios o tasa de suicidios: “Entre 2000 y 2017, en la fase central de la estabilización putiniana, la tasa de muerte por alcoholismo cayó en Rusia de 25.6 por 100.000 habitantes a 8.4; la tasa de suicidio de 39.1 a 13, 8; la tasa de homicidios de 28.2 a 6.2. […] En 2020, la tasa de homicidios cayó aún más, a 4.7 por 100.000, seis veces menos que cuando Putin llegó al poder. Y la tasa de suicidio en 2021 fue de 10.7 o 3.6 veces menor. En cuanto a la mortalidad infantil anual, cayó de 19 por 1000 en el año 2000, a 4.4 en 2020, pasando por debajo de la tasa estadounidense de 5.4″. Esta recuperación está materializada por una recuperación industrial que ilustra perfectamente el porcentaje de estudiantes que siguen los estudios de ingeniería (23.4% contra 7.4% en los Estados Unidos).

Emmanuel Todd – escribe el digital francés- comienza objetivando la descomposición social estadounidense mediante el uso de las cifras: la esperanza de vida y la mortalidad infantil, para observar que en ambos casos, que la situación estadounidense se deteriora: «Sólo entre los países avanzados, Estados Unidos experimenta una caída global en la esperanza de vida: de 78.8 años en 2014 a 77.3 años en 2020. […] La tasa de mortalidad infantil, anunciadora de futuro, indica un retraso de Estados Unidos, más acentuado incluso que el de los países avanzados que «protege» o de los que combate. Hacia 2020, según UNICEF fue de 5.4 por 1000 nacimientos vivos en los Estados Unidos, contra 4.4 en Rusia, 3.6 en el Reino Unido, 3.5 en Francia, 3.1 en Alemania, 2. 5 en Italia, 2.1 en Suecia y 1.8 en Japón».

En un tercer capítulo dedicado a la descomposión de EEUU, Todd describe la desconexión de la realidad de la élite de Washington que vive encerrada en sí misma y se orienta hacia el mantenimiento de su propio poder. Su párrafo sobre la familia Kagan & Nuland, quien realmente reina sobre la política exterior estadounidense a través del Departamento de Estado y la Fundación Institute for the Study of War (Instituto para el Estudio de la Guerra), sería hilarante si todo esto no fuera trágico. ¿Cuántos cientos de miles de muertos hay en Ucrania? Y ¿por qué ?, escribe el medio francés y señala que la conclusión de Todd es inquietante porque la anglosfera, desprovista de la realidad social, entró dentro de la locura nihilista que no le deja otra solución que hacer la guerra.

Libros interesantes de Todd que se pueden encontrar en castellano son:   Después del imperio: ensayo sobre la descomposición del sistema norteamericano (2002); La ilusión económica: sobre el estancamiento de las sociedades desarrolladas (1999); Después de la democracia, (2010).