ESPIONAJE: Dinamarca ayudó a EEUU a espiar a los principales gobernantes y altos cargos europeos
Algo huele a podrido en Dinamarca

Entre 2012 y 2018 -año en que un empleado de la inteligencia danesa lo denunció ante un organismo de control de su gobierno- el Servicio de Inteligencia de Defensa de Dinamarca (FE), junto a la NSA estadounidense espiaron a los líderes políticos y funcionarios de gobierno de primera línea de Francia, Alemania, Noruega y Suecia. Los datos interceptados desde los cables de internet daneses se copiaban en instalaciones secretas de Dinamarca y se analizaban en un centro construido a tal efecto, al sur de la isla danesa de Amager, a poca distancia de Copenhage, la capital del país.
El «Snowden vikingo»
El denunciante -bautizado por los medios como «el Snowden vikingo»- que informó a la junta de supervisión de inteligencia, dijo que «temía que la administración del Servicio de Inteligencia de Defensa danesa estuviera haciendo negocios en EEUU al dejar a propósito al sistema con vulnerabilidades técnicas que permitían a la NSA abusar del mismo». Según el prestigioso diario danés Belingske, el denunciante es uno de los empleados más jóvenes de la inteligencia danesa, con un perfil similar al de Edward Snowden. Antes de acudir al organismo de control de las actividades de inteligencia, el joven especialista expuso sus críticas a su jefe, y éste creó un grupo técnico para revisar el sistema en busca de vulnerabilidades o signos de abuso por parte de la NSA, incluyendo al joven en el equipo de trabajo para tranquilizarlo. En 2014, el equipo concluyó que no había señales de intrusión ilegal y se cerró el caso. Pero el joven analista de inteligencia no quedó satisfecho y entró subrepticiamente una grabadora a su lugar de trabajo, y grabó en secreto conversaciones con colegas y jefes durante meses. Luego, con el material grabado, en noviembre de 2019 se dirigió a la junta de supervisión de las actividades de inteligencia del país, quienes luego de estudiarlas las remitieron a la ministra de Defensa. Según informa Berlingske, las grabaciones proporcionaron muchas horas de material que confirma la sospecha de que la inteligencia danesa pudo haber actuado ilegalmente. La ministra de Defensa, a diferencia de sus antecesores se tomó en serio el tema y pidió una investigación oficial realizada por la junta de supervisión. Como resultado de la misma, en agosto de 2020 fue cesado el jefe del Servicio de Inteligencia de Defensa y algunos otros funcionarios. En octubre, el gobierno danés decidió establecer una comisión especial para realizar una investigación independiente sobre las acusaciones contra los servicios de inteligencia. El informe debe presentarse en octubre de 2021.
Bill Clinton convenció a un primer ministro socialista para espiar junto a la NSA
Los antecedentes de este vergonzoso capítulo de la historia danesa se remontan a 1990 -según viene informando desde finales de 2020, el diario Berlingske– cuando la NSA descubrió que en algún lugar debajo de Dinamarca había un cable troncal por el cual circulaban llamadas telefónicas, correos electrónicos y mensajes de texto desde y hacia países como China y Rusia. Llegar hasta ese cable era casi imposible sin la ayuda de los daneses, por lo que la NSA le pidió a la inteligencia danesa acceso al cable, pero esta solicitud fue denegada por el gobierno de Dinamarca. Entonces, intervino directamente el presidente Bill Clinton ante el primer ministro danés de la época Poul Nyrup Rasmussen, un socialdemócrata que ocupó el cargo durante cuatro legislaturas, fue secretario general de su partido, fue presidente de los socialistas europeos, y actualmente es europarlamentario. Rasmussen, partidario de unas «relaciones cercanas con EEUU» -la versión del primer mundo de las «relaciones carnales con EEUU» del ex presidente argentino Menem- dijo que sí a Clinton, y la cooperación se estableció en un documento secreto que sólo conocería un exclusivo círculo de gobernantes daneses. El gobierno pidió la colaboración de la empresa privada danesa que operaba el cable, la compañia aceptó, pero pidió que el acuerdo estuviera ratificado por la máxima autoridad del país. Por lo tanto, firmaron el propio Rasmussen, el ministro de Defensa y el jefe del departamento de inteligencia. Se hizo sólo una copia del acuerdo y se guardó en una fortaleza histórica de Copenhague, que alberga la sede de la inteligencia danesa.
Parte del acuerdo entre EEUU y Dinamarca fue que los estadounidenses no usarían el sistema contra ciudadanos y empresas danesas, y viceversa. La FE intentó desarrollar una serie de filtros para garantizar que los datos de los ciudadanos y las empresas danesas quedaran encriptados y no se pudieran buscar, pero el ex ministro de Defensa danés Claus Hjort Frederiksen dijo recientemente que si bien hubo un intento de desarrollar tales filtros, no puede haber garantía de que la información danesa quedara protegida. Según una fuente citada en el periódico Berlingske, «en una oportunidad la NSA envió una solicitud para buscar una empresa en un país de Asia, pero la FE descubrió que la empresa era de propiedad danesa». Esto muestra que el interés de la NSA era bastante «amplio».
Se desconoce el nombre en clave de esta cooperación, pero es probable que forme parte del programa RAMPART-A de la NSA, que data de 1992, mediante el cual los socios extranjeros de EEUU brindan acceso a cables de fibra óptica internacionales, mientras que EEUU proporciona el equipo para el procesamiento y análisis.
El Servicio de Inteligencia de Dinamarca colaboró con EEUU para espiar a Angela Merkel, y a líderes políticos franceses, noruegos y suecos a través de cables de internet daneses

Una investigación interna secreta en el Servicio de Inteligencia de Defensa danés (FE), con el nombre en clave Operación Dunhammer reveló extensas escuchas telefónicas en Dinamarca contra los países vecinos
NIELS FASTRUP –LISBETH QUASS / DR
El poderoso servicio de inteligencia estadounidense NSA con la colaboración del Servicio de Inteligencia de Defensa (FE) de Dinamarca, espió a través de los cables de Internet daneses a dirigentes de Estado, líderes políticos y funcionarios de alto rango de Alemania, Suecia, Noruega y Francia.
La canciller alemana Angela Merkel, el entonces ministro de Relaciones Exteriores alemán Frank-Walter Steinmeier y el entonces líder de la oposición alemana Peer Steinbrück se encuentran entre los políticos de países vecinos de Dinamarca que la NSA ha espiado a través de la cooperación entre Dinamarca y Estados Unidos. Estas fueron algunas de las conclusiones tras una investigación interna secreta en la FE, concluida en mayo de 2015.
Diversos medios de los países afectados – los alemanes Süddeutsche Zeitung, NDR, WDR y el francés Le Monde , entre otros- se han hecho eco de las revelaciones publicadas en Dinamarca.
«Angela Merkel, Steinbrück y Steinmeier no estaban sólo en la cima de la política alemana, sino que son la superliga de la política europea… el espionaje pone a Dinamarca en un problema con Europa», dice el profesor asociado e investigador de inteligencia Thomas Wegener Friis de la Universidad del Sur de Dinamarca. Angela Merkel ha sido la canciller de Alemania desde 2005. En relación con una filtración de documentos de la NSA, se informó anteriormente de que Estados Unidos intervino su teléfono. En ese momento, Alemania simplemente dijo «no hagan eso», y lo consideró «espionaje entre amigos». Frank-Walter Steinmeier del SPD (Partido Socialista alemán) ha sido el presidente federal de Alemania desde 2017 y, por lo tanto, es el jefe de Estado del país. Antes de eso, fue Ministro de Relaciones Exteriores de Alemania desde 2013. Peer Steinbrück fue líder de la oposición y candidato a canciller por el SPD en las elecciones al Bundestag en 2013. Anteriormente fue ministro de Finanzas de Alemania.
Operación Dunhammer
Durante meses, DR ha mantenido varias reuniones con nueve fuentes diferentes, todas las cuales han tenido acceso a información clasificada de la FE. Toda la información del artículo está confirmada por varias fuentes de forma independiente. La investigación secreta interna de la FE sobre el espionaje estadounidense a través de los cables de Internet daneses tenía el nombre en clave de ‘Operación Dunhammer’ (N.de la E.: «dunhammer» es el nombre de las totoras o juncos silvestres de Dinamarca, que crecen en los pantanos, con fuertes raíces bajo el agua).
La investigación fue realizada por un grupo de trabajo formado por cuatro hackers y analistas del servicio de inteligencia, quienes investigaron la cooperación entre Dinamarca y Estados Unidos en el más profundo secreto para evitar que la NSA se enterara de la investigación. Las conclusiones del grupo de trabajo se resumieron en un informe secreto titulado «Dunhammer», que fue entregado a la dirección de FE en 2015.
Según las fuentes, el informe y los datos de inteligencia en los que se basa la Operación Dunhammer, son el punto focal del escándalo que estalló entre la FE y el Ministerio de Defensa en agosto del año pasado y provocó la destitución de los jefes del servicio de inteligencia. El caso se perfila como el mayor escándalo de inteligencia en la historia de Dinamarca, dijo una fuente cercana a la investigación.
Selección deliberada de objetivos
Una conclusión importante del informe Dunhammer es que la NSA ha obtenido deliberadamente datos espiados sobre los políticos y funcionarios noruegos, suecos, alemanes y franceses a través de la cooperación entre Dinamarca y Estados Unidos.
El grupo de trabajo interno secreto de inteligencia reveló, entre otras cosas, que la NSA aparentemente utilizó los números de teléfono de los políticos y funcionarios en cuestión como selectores. Esto significa que la NSA ha utilizado los números de teléfono como parámetros de búsqueda para extraer la comunicación de los políticos y funcionarios de los extensos flujos de datos que pasan por los cables de Internet hacia y desde Dinamarca.
La NSA interceptó todo, desde mensajes de texto hasta llamadas telefónicas que pasaban a través de los cables en su camino hacia y desde los teléfonos de los políticos y funcionarios. Una fuente, explica : «Ellos [la NSA] obtuvieron todo para lo que usaron sus teléfonos. No se puede evitar el hecho de que se trata de una obtención específica. Me resulta muy difícil ver que redunde en los intereses de Dinamarca o en los intereses de los países occidentales aliados. Al contrario, socava nuestros sistemas políticos».
No ha sido posible obtener una respuesta sobre cuántos políticos y funcionarios en los países vecinos de Dinamarca fueron espiados por la NSA a través de la cooperación danesa. Los nombres de los tres principales políticos alemanes que se revelan hoy son sólo una selección de varios nombres que el grupo de trabajo de la Operación Dunhammer descubrió. » Estos son políticos de áreas en las que los servicios de inteligencia están clásicamente interesados», dijo una fuente.
Dinamarca queda en una posición delicada ante sus socios europeos
[En Dinamarca] no es ilegal que el Servicio de Inteligencia ayude a un socio comercial a espiar a otros países, pero es políticamente grave que hayan dado a la NSA acceso para espiar a los políticos de países amigos vecinos interceptando cables dentro y fuera de Dinamarca, dicen los expertos.
«Este es un caso delicado para Dinamarca, para los estadounidenses y para los países que hemos espiado», dice el profesor Jens Ringsmose de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad del Sur de Dinamarca.
En Suecia, el parlamentario sueco Jens Holm describe como «extremadamente escandaloso y sorprendente» que la FE danesa haya dado acceso a la NSA para espiar a los políticos suecos. “Es una violación de Suecia como país, ya que nosotros, como políticos, representamos al pueblo sueco. Representamos a Suecia – dice Jens Holm- parlamentario del Partido de la Izquierda, partido de apoyo al gobierno. Señala, además, que no es sólo la propia comunicación de los políticos a la que la NSA ha obtenido acceso a través de la cooperación danesa. La NSA también ha podido interceptar comunicaciones de quienes contactan con esos políticos. «Pueden ser personas que se esconden porque son perseguidas en su país de origen, pueden ser periodistas que quieran hablar de temas delicados, pueden ser activistas políticos, políticos de oposición de otros países, etc.», dice Jens Holm y agrega, que es una violación de los derechos de todos los involucrados.
El líder del Partido de la Izquierda Socialista en Noruega, Audun Lysbakken, lo describe como un «abuso de confianza profundo, grave y perturbador», que la NSA haya espiado a políticos noruegos a través de Dinamarca. «Es absolutamente necesario poner las cartas sobre la mesa y averiguar qué ha sucedido, dice Audun Lysbakken, que forma parte de la oposición en el Parlamento noruego.
En Alemania, el congresista Patrick Sensburg de la CDU no está tan sorprendido como su colega sueco. De 2014 a 2017, Patrick Sensburg fue presidente de una comisión que investigó la interceptación de servicios de inteligencia extranjeros en Alemania, y describe como una práctica común que incluso los países de la UE se espíen entre sí. «Supongo que Dinamarca no ha interceptado deliberadamente a los principales líderes políticos, pero la pregunta que surge ahora es cuán deliberadamente ha sucedido esto», dice Patrick Sensburg.
La ‘joya de la corona’ de la inteligencia danesa en el foco del escándalo
Según las fuentes, el espionaje de la NSA contra políticos y funcionarios de los países vecinos de Dinamarca se llevó a cabo a través de un sistema técnico especial que la NSA y la FE utilizaron para interceptar las comunicaciones de los cables de Internet daneses. El sistema de espionaje ha hecho posible que la FE obtenga, entre otras cosas, conversaciones telefónicas, mensajes de chat y mensajes de texto en una magnitud sin precedentes. Las fuentes describen el sistema de espionaje como la herramienta más eficaz de la FE cuando se trata de acceder a información sobre todo, desde planes terroristas hasta información sobre Rusia y China. Las fuentes describen el sistema de espionaje como la joya de la corona de la inteligencia danesa.
El sistema de espionaje funcionaba de esta manera: en uno o más lugares secretos de Dinamarca, la FE, en colaboración con la NSA, copiaba la comunicación y los llamados metadatos que pasan a través de los cables de Internet daneses. Luego, la comunicación se enviaba a un centro de datos construido a tal efecto en Sandagergård, al sur de la isla danesa de Amager, que alberga algunas de las actividades más secretas de inteligencia.
En Sandagergård, según revelaron las fuentes a DR -que hablaron bajo la condición de anonimato- la comunicación y los datos se almacenan en un período en el que analistas especialmente capacitados tanto de la FE como de la NSA pueden buscar los flujos de comunicación con un programa de especial llamado Xkeyscore, que ha sido desarrollado por la NSA.
El acceso a los cables de Internet de dentro y fuera de Dinamarca también tiene un gran valor para la NSA, según las fuentes. Esto se debe sobre todo al hecho de que Dinamarca constituye geográficamente un centro para el tráfico global de Internet con acceso a cables con flujos de comunicación de un gran número de países europeos y de Rusia.
La colaboración para escuchar a escondidas los cables de Internet desde y hacia el país es tan importante que «tiene un significado estratégico para la relación entre Dinamarca y Estados Unidos», dice una fuente.
Las revelaciones de Snowden alertaron a altas esferas de la inteligencia danesa
El público rara vez se entera del espionaje de los servicios de inteligencia o de sus colaboraciones con los servicios de inteligencia de otros países. Pero la información sobre el espionaje de la NSA a través de la cooperación con Dinamarca durante años ha dado lugar a discusiones internas en la inteligencia danesa, dicen las fuentes a DR.
El caso se remonta a 2013, cuando el denunciante estadounidense Edward Snowden filtró una gran cantidad de documentos sobre los métodos de trabajo de la NSA. En los años posteriores a la filtración, los medios, basados en los documentos de la NSA, revelaron que la NSA estaba detrás de la vigilancia masiva global y el espionaje de los líderes electos de las naciones aliadas, incluso a través de colaboraciones con los servicios de inteligencia de otros países. Las revelaciones de Snowden no pasaron desapercibidas en esferas más altas del departamento de la FE en la isla de Amager, donde los empleados monitorean los cables de Internet. Allí surgió la preocupación de si la NSA había utilizado el sistema de espionaje danés para espiar objetivos en Dinamarca y a sus vecinos más cercanos.
En 2014, la dirección de la FE dio luz verde al establecimiento de un grupo de trabajo interno secreto con cuatro hackers informáticos y analistas, que bajo el nombre en clave de Operación Dunhammer, examinaron hasta 2015 la cooperación entre Dinamarca y Estados Unidos.
Hasta mayo de 2015, el grupo de trabajo investigó de quién había obtenido información la NSA a través del sistema de espionaje. El grupo de trabajo analizó las palabras clave que la NSA había utilizado para interceptar la comunicación en 2012 y 2014, respectivamente.
Una conclusión importante del informe fue que la NSA había utilizado la colaboración con FE para espiar a políticos y funcionarios en los países vecinos de Dinamarca. “Me cuesta mucho ver que este tipo de espionaje de los vecinos esté en los intereses de Dinamarca, de los Aliados, o de los países occidentales. Por el contrario, socava nuestros sistemas políticos, que es lo que queremos asegurar en una democracia”, dice la directora de investigación Pernille Boye Koch del Departamento de Derechos Humanos, quien ha investigado el control de los servicios de inteligencia.
El Informe Dunhammer no detuvo la cooperación con la NSA
De la portada del informe Dunhammer se desprende que fue leído por el entonces director de los servicios de inteligencia daneses, y por el entonces director del departamento. Por lo tanto, la dirección de la FE parece haber sabido sobre el espionaje de la NSA contra políticos y funcionarios de los países vecinos más cercanos de Dinamarca, al menos durante los últimos seis años.
Sin embargo, según las fuentes, la dirección de FE no consideró que el Informe Dunhammer diera motivos para detener la cooperación con la NSA. La dirección sacó sus propias conclusiones sobre la investigación secreta del grupo de trabajo interno en un memorando separado, y la Operación Dunhammer no puso fin al espionaje.
En 2018, tres años después del final de la Operación Dunhammer, uno de los miembros del grupo de trabajo decidió, ponerse en contacto con la Autoridad de Servicios de Inteligencia danesa que controla a los Servicios de inteligencia del país. El empleado informó sobre la Operación Dunhammer a la inspección, y sobre esa base inició una investigación. La Autoridad de Servicios de Inteligencia es un organismo de control independiente creado en 2014, cuya tarea es comprobar si los servicios de inteligencia daneses cumplen la ley cuando recopilan, procesan y transmiten información a los servicios de inteligencia de otros países. Este organismo consta de cinco miembros y una secretaría.
Durante la investigación, la Autoridad habló con la FE varias veces para obtener una explicación de lo sucedido en la colaboración con la NSA sobre el sistema de espionaje. A fines de 2019, el empleado de FE que les informó del caso proporcionó material adicional para la auditoría.
La investigación de la auditoría terminó en agosto del año pasado, causando un escándalo cuando los auditores entregaron una declaración de cuatro volúmenes al Ministro de Defensa y emitieron un comunicado de prensa con durísimas críticas a la FE.
En el comunicado de prensa, los inspectores acusaron, entre otras cosas, a la FE de «no haber seguido ni investigado más los indicios de espionaje». Las críticas de la auditoría llevaron a la destitución de varios jefes de la FE. El gobierno también estableció una comisión con tres jueces de distrito.
El investigador de inteligencia Thomas Wegener Friis dice que es «repugnante» que la FE haya ayudado a la NSA a espiar a Alemania, Suecia, Noruega y Francia. “Esos no son poderes oscuros, no son países que estén a punto de invadirnos. Esos son algunos de nuestros mejores amigos en el mundo. Y quien ayuda a otros a engañar a sus mejores amigos, no está actuando bien”, dijo.
La NSA y el Servicio de Inteligencia de Defensa danés se negaron a comentar el caso.
Responder