GEOINGENIERÍA: El gran perjudicado será el Sur Global

Geoingeniería en el Sur Global

Entrevista a Silvia Ribeiro directora en Latinoamérica del Grupo ETC (Grupo de Acción sobre Erosión, Tecnología y Concentración).

Silvia Ribeiro ha estado investigando en temas de geoingeniería durante 13 años, y estuvo en las negociaciones de la ONU que aprobaron en 2010 la moratoria global sobre el despliegue de la geoingeniería, que fue respaldada por los 196 países que son miembros de la Convención de las Naciones Unidas sobre la Biodiversidad. (N.de la E.: Ribeiro es una periodista uruguaya, especialista en investigación y documentación sobre diversidad biológica, biopiratería, transgénicos y globalización corporativa. Ha ocupado la vicepresidencia de Amigos de la Tierra Internacional, es columnista del diario mexicano La Jornada, miembro del comité editorial de la revista latinoamericana Biodiversidad, sustento y culturas y de la revista española Ecología Política).

Desde principios de la década de 2000, los multimillonarios y las empresas de combustibles fósiles se han enfrentado a la necesidad de reducir el consumo de los mismos. Como reacción, muchos de ellos están desarrollando formas de justificar la continuación de la extracción y quema de combustibles fósiles. Muchas de sus propuestas entran en la categoría de geoingeniería, que  significa manipular el clima a escala planetaria (para “remediar “ el cambio climático).

Los geoingenieros, como se los llama (N.de la E.: no existe ninguna carrera de “geoingeniería”, en realidad son equipos de informáticos, matemáticos, físicos, geólogos), planifican intervenciones que afectarían a todos los ecosistemas si se implementaran.

Los críticos de estas intervenciones clasifican la geoingeniería según los lugares donde se sentirán los efectos: geoingeniería terrestre, geoingeniería oceánica y geoingeniería atmosférica. Pero los defensores de la geoingeniería clasifican los diferentes tipos de intervenciones por distinciones técnicas. En la siguiente entrevista, se hará referencia a la geoingeniería solar y la eliminación de dióxido de carbono. La geoingeniería solar se refiere a la idea de bloquear la luz solar para que no llegue a la tierra o bien reflejarla en el espacio.

Estas teorías sobre el bloqueo de luz solar a veces se denominan Gestión de la radiación solar o SRM. La eliminación de dióxido de carbono o CDR se refiere a los intentos de extraer carbono de la atmósfera, generalmente para enterrarlo bajo tierra, en la tierra o en el mar. Hay profundos problemas con ambos grupos de propuestas. Si se implementan a gran escala, podrían tener efectos desestabilizadores en los patrones climáticos y los ecosistemas en todo el mundo.

La geoingenieria en la agenda del Norte

Pregunta: Se ha señalado que gran parte de la actividad de geoingeniería proviene del Norte y tiene un efecto desproporcionado en el Sur. Puede explicarlo, y cómo ve que se desarrollan esas dinámicas.

Silvia Ribeiro: En cuanto a los investigadores, la mayoría de ellos están radicados ​​en el Norte, y están financiados por multimillonarios o gobiernos del Norte. No hay una cifra concreta porque nadie sabe exactamente cuántos son, pero yo diría que el 90% de los investigadores están ubicados en el Norte. Y aunque estén en el Sur, muchas veces responden a proyectos del Norte. Si miramos quién está financiando y quién está investigando, se ve que es definitivamente un proyecto del Norte. Pero lo más importante de por qué este es un proyecto del Norte, es que la geoingeniería es una forma de perpetuar el sistema en el que ya estamos.

Históricamente, el cambio climático ha sido producido principalmente por 10 países. Estos 10 países, de los cuales EEUU ha sido históricamente el líder en emisiones de gases de efecto invernadero que causan el cambio climático, representan más de dos tercios de las emisiones que se han producido en general y es más que el resto de todos los países juntos, y todos los demás países están, la mayoría de ellos en el Sur y hay algunos en el Norte también. África, por ejemplo, no ha causado ningún cambio climático en absoluto.

En términos actuales, la situación sigue siendo que 10 países han producido dos tercios de las emisiones (según datos de 2019, generan el 72% del total). Estados Unidos es uno de los más grandes. Desde hace unos años, el primero es China, pero si miramos las emisiones per cápita en China y en los EEUU, en EEUU son casi diez veces mayores que en China. Estados Unidos, con el 4 % de la población mundial, consume ahora alrededor del 25% de la energía global. No se trata sólo de EEUU en si, sino que el problema es que la mayoría de las ideas, las propuestas, los investigadores y el dinero para la geoingeniería provienen de EEUU. (N.de la E.: Es muy interesante ver las emisiones de gases contaminantes per cápita de cada país, porque permite comprar las emisiones en relación a la población del país y ver por ejemplo que China produce 8,12 toneladas de Co2 per cápita, frente a las 38,82 de Qatar; las 23,29 de Kuwait, las 23,81 de Trinidad y Tobago, etc.).

Uno se pregunta, ¿por qué se está desarrollando toda esta investigación sobre una tecnología que implica muchos riesgos? Resulta que casi todas las compañías petroleras, las compañías de combustibles fósiles, tienen su sede en Estados Unidos. En este sentido, no se trata sólo de la investigación, también se trata de saber qué están tratando de hacer. Existe mucha especulación sobre cómo podríamos abordar algunos de los síntomas del cambio climático que definen.  Además, tienen control sobre gran parte de los modelos que se presentan. No sólo están en los Estados Unidos, sino que también están en las instituciones de investigación internacionales, donde la mayoría de ellos, nuevamente, son investigadores del Norte.  Ellos definen qué es una emergencia, cuánto durará y cuáles serán las medidas que necesitamos. Estamos expuestos a esto todo el tiempo en el discurso de la geoingeniería. Por otro lado, podemos ver que ni siquiera están pensando en la gente. En la mentalidad de los geoingenieros, no piensan en que la gente del Sur y los gobiernos del Sur quieran hacer algo completamente diferente, incluso cuando se enfrentan a una emergencia.

Por ejemplo, ¿por qué un gobierno (del Sur)  querría desarrollar una tecnología muy complicada, que tiene mucho riesgo, en lugar de invertir masivamente en algún tipo de adaptación y tomar medidas para salvar a la gente de las inundaciones? Por supuesto, el punto principal de todo es que la única forma de abordar el cambio climático es la reducción real tanto de la fuente de las emisiones como del consumo. Porque son ambas partes, las claves del cambio climático.

La geoingeniería no toca nada de eso. Es como preservar el status quo, dicendo: «Bueno, por si acaso tenemos una temperatura superior a 1,5 grados, podemos secuestrar o absorber el dióxido de carbono de la atmósfera, no podemos desperdiciar nada de tiempo, tenemos que hacer estas reducciones». Esa es su prioridad y están trabajando desde los países que son los actores del cambio climático, los verdaderos culpables del cambio climático. No me gusta hablar de todo el país porque también hay gente pobre en esos países, por supuesto, que no se están beneficiando de eso.

Los poderes, la economía y esos gobiernos, están trabajando en estas soluciones que darán una coartada a estos países.  La otra cosa que me parece realmente imponente es que no están buscando soluciones reales, la mayoría de las cuales están ubicadas en el Sur y vienen del Sur. Como ha demostrado nuestro trabajo en ETC, una de las soluciones más importantes al cambio climático, no la única, son los cambios profundos en el sistema alimentario.

La mayoría de los productores de alimentos que son diversos, que se ubican localmente y son sustentables, que no usan químicos son agricultores, campesinos en el Sur. No es sólo en el Sur, están en todas partes donde hay este tipo de agricultura a pequeña escala, lo que llamamos la Red Alimentaria Campesina. Los geoingenieros  no están mirando este tipo de cosas, ni siquiera son conscientes de que muchas de las propuestas de la geoingeniería impactarán particularmente en esos colectivos.

Geoingeniería marina: Intervenciones en el Atlántico Sur

Por ejemplo, en el caso de la Fertilización Oceánica,  el proyecto consistía en fertilizar el mar de Sulu entre las islas de Filipinas. Eso habría dejado sin trabajo a 10.000 pequeños pescadores.

(N.de la E. :La fertilización del océano es una forma de geoingeniería  que implica agregar nutrientes a las capas superiores del Océano iluminadas por el sol para estimular el crecimiento del fitoplancton en un intento por reducir los niveles de CO2 atmosférico.  Pero el fitoplancton absorbe todos los nutrientes disueltos que sustentan todas las redes alimentarias de los océanos, y no sólo el carbono que se busca que absorban. El primer experimento se realizó en aguas puras de la Antártida en 1989, por el laboratorio marino de la Universidad de California, el siguiente fue IRONEX I ceca de las Islas Galápagos; en 1999 se llevó a cabo el Experimento de Liberación de Hierro en el Océano Austral (SOIREE) en el Frente Polar Antártico – en una zona donde Argentina tiene aguas territoriales y cabe preguntarse si les pidieron permiso-; en 2004 se llevó a cabo el experimento EisenEx (sólo entre un 10 y un 20 % de la floración de algas resultante murió y se hundió hasta el fondo del mar, que es el objetivo buscado: que se hundan llevando el carboo capturado al fondo del océano). En 2007 una serie de empresas comerciales con sede en Australia pretendieron entrar en el negocio de la Fertilización Oceánica proponiendo a empresas contaminadoras que contrataran sus servicios a cambio de obtener créditos para la emisión de Co2. Ese mismo año, la empresa estadounidense Planktos tuvo que abandonar sus proyectos de seis expediciones, cuando se le negó la entrada en el puerto español de Las Palmas de Gran Canaria. En 2009 Alemania llevó a cabo su sexto proyecto LOHAFEX desde 1993. El buque Polarstern del instituto Alfred Wegener de Alemania zarpó del puerto de Ciudad del Cabo (Sudáfrica) hacia el mar de Scotia, entre la península Antártica y la Argentina, lanzando 6 toneladas de sulfato ferroso en un área de 300 km2. Fue un fracaso, y el gobierno alemán lo detuvo por las protestas de los ambientalistas. El Polarstern llevaba a un equipo de 48 técnicos de Alemania, India, Italia, España, Chile, Francia y Gran Bretaña.  La expedición terminó en Punta Arenas, Chile, el 17 de marzo de 2009. Al parecer nadie «se acordó» de consultar con los argentinos. Chile sí fue invitado pero no consta ningún representante argentino. En 2012, cuando ya existía la moratoria internacional, hubo otro proyecto en la Antártida).

Y si se trata de  Gestión de la Radiación Solar, provocará cambios en todo el mundo. Como ha demostrado el investigador Alun Robock y muchos de los modelos matemáticos, tendrá un impacto muy fuerte en el régimen del monzón en Asia y también producirá sequías en África.

Afectarán a algunas de las regiones más pobres del mundo para tener algo que teóricamente baje la temperatura, particularmente para las regiones del Norte.

Una de las propuestas, es la que trata de poner aerosoles estratosféricos en el Ártico. Ninguna de las propuestas escuchan, ni consideran a las personas y organizaciones del Sur. No sólo no escuchan las inquietudes que causan, sino  tampoco las propuestas y las cosas que quiere hacer el Sur.

Pregunta: Sobre esto último que acaba de mencionar, he oído a David Keith (profesor de Física Aplicada de la Universidad de Harvard y codirector del Programa de Investigación de Geoingeniería Solar de Harvard, fundado en 2017) decir varias veces que sus estudios muestran que la geoingeniería solar en realidad reduciría las temperaturas a nivel mundial de manera uniforme sin estos efectos (no deseados) regionales que preocupan a la gente en otros estudios. ¿Dónde está ese debate en este momento y cuál es su observación al respecto?

Silvia Ribeiro: Bueno, el problema es que todas las propuestas que vinieron para la Gestión de la Radiación Solar al principio, cuando toda la discusión sobre geoingeniería surgió -después de 2006-  se basaron en cubrir el Ártico con algún tipo de capa que reflejara el sol.

Las propuestas que realmente tengan un efecto sobre el clima y a nivel global, también desequilibrarán los patrones de lluvia y viento y afectarán particularmente a las personas en los trópicos, en el Sur de África y América Latina.

Lo que pasó es que la gente vio que esto es realmente malo. Con la Gestión de la Radiación Solar, dice Alun Robock, no el Grupo ETC, que 2 mil millones de personas podrían ver en peligro su fuente de alimentos y agua. (N. de la E.:Alan Robock es un prestigioso climatólogo).  Lo que hicieron [los geoingenieros] después de eso fue comenzar a ajustar el modelado de las simulaciones por computadora. Dijeron: «Bueno, en lugar de hacer tanto aquí, podemos hacer un poco de geoingeniería en otra parte. Si eliminamos mucho dióxido de carbono, tendremos otro escenario».

Una de las expresiones que se utilizó fue que harían “cócteles de geoingeniería”. Harán un poco aquí, un poco allá. Basados, no en el cóctel en sí, sino en base a estos retoques de los modelos, han venido con una serie de otros escenarios, donde dicen: «Bueno, podríamos hacer un poco menos aquí y aumentar un poco más allá. Si hacemos esto, y esto y aquello, y cambiamos esto y ese modelo…», pero el problema es que esto es extremadamente especulativo, porque  básicamente toda la geoingeniería, particularmente la geoingeniería solar, se basa totalmente en teorías y especulaciones.

Pueden especular cualquier cosa. Pueden seguir moviendo los modelos hasta que obtengan algunos resultados que creen que parecen ser mejores. Eso es exactamente lo que están haciendo. Algo de lo que están haciendo ahora es tratar de conseguir equipos (de investigadores)  en algunos países del Sur, sólo para tratar de contrarrestar esta percepción de que están enfocados en el Norte, pero aún así, están financiados por el Norte y con una agenda que es del Norte. Y están modificando los modelos, hasta que obtengan un resultado que diga «así podríamos tener mejores resultados o menos problemas climáticos».  Está muy lejos de ser probado. No está probado lo que sucedería con esa tecnología en el Sur porque los diferentes factores en los sistemas climáticos interactúan entre sí en dinámicas cambiantes, no sólo del cambio climático, sino también de otros fenómenos que están sucediendo.

Estos son modelos que podrían ser útiles para tener algunos escenarios, pero no son la realidad. En el caso de la geoingeniería, se trata más bien de cómo se utiliza. Se utiliza como una forma de influir en las políticas. Es influyente permitir que se implemente la geoingeniería, aunque no sepan lo que sucederá. Y todo lo que hagan tendrá efectos terribles, especialmente en el Sur.

Lo que está oculto es que están hablando  del uso masivo de otras formas de geoingeniería. Están insinuando que habrá un mecanismo global que controlará [todas las actividades de geoingeniería] para que se puedan usar un poco aquí y un poco allá. Todo eso ignora por completo la realidad política del mundo: las desigualdades, las diferencias entre países, pero también la realmente dificil situación geopolítica.

Desplegar la geoingenieria requerirá fuerzas militares

Periodista: ¿Puede hablar un poco más sobre esa situación geopolítica? ¿Cuál es la desigualdad de poder ahora entre el Norte y el Sur en lo que respecta a la geoingeniería y cómo es probable que se desarrolle si la geoingeniería avanza? ¿Afectará la dinámica de poder entre la mayoría del mundo y estos 10 países de los que estás hablando?

(N. de la E.: más que países podría ser más acertado hablar de corporaciones –las de la industria de los combustibles fósiles y subsidiarias – que tienen una enorme influencia sobre los gobiernos aún los de las naciones más poderosas)

Silvia Ribeiro: Bueno, lo que pasa hoy es que la geoingeniería es una herramienta que es una propuesta tecnológica que asume no sólo que hay dinero para desplegarla, sino también ciertas condiciones para controlarla. En muchos casos, se ha dicho que involucrará a militares para ser desplegados debido al campo donde necesitan usarlo, y debido a los permisos que necesitan para usar el espacio y muchas otras cosas. Eso significa también que exacerbará las desigualdades geopolíticas que ya existen, donde (el Norte) tienen más recursos no sólo en términos de tecnología, dinero, sino también de ejércitos.

El principal problema es que esos países, como dije antes, son los principales culpables del cambio climático. Si no hacen nada para abordar el cambio climático y comienzan con la geoingeniería, entonces va a ser un mercado cautivo perfecto para quienes controlan la geoingeniería, porque siempre se necesitará implementar más y más geoingeniería porque el cambio climático continuará. Ese es uno de los principales problemas entre las muchas cosas fantásticas que producen los geoingenieros. También se ha dicho que los efectos de la geoingeniería son tan terribles que una vez que se investigue y haya posibilidades de implementarla, los países tendrían tanto miedo que no la usarían.

La geoingeniería está favoreciendo el desvío de la atención y los recursos para las soluciones y las medidas reales que hay que tomar y poner en marcha. 

La geoingeniería que funcione necesariamente dejará naciones perdedoras

En cuanto al Norte-Sur, lo que ha pasado es que, de nuevo, hoy tenemos una discusión muy amarga en la convención sobre cambio climático para ver cómo pueden hacer que esos países que son los principales emisores de gases contaminantes realmente se refrenan y cambien estos patrones. ¿Y cómo lo van a hacer? Una vez que empiecen con la geoingeniería, ¿se detendrá si es un negocio para ellos? Agregarán una capa de complejidad a algo que creará más desigualdad entre el Norte y el Sur.

Aún así, Naciones Unidas es lo más parecido que tenemos a algo que podría ayudar a los países del Sur a hacer algo, y es por eso que 196 gobiernos que forman parte del Convenio sobre la Diversidad Biológica votaron por un enfoque de precaución al respecto.

El enfoque de precaución es no desplegar antes de que haya un acuerdo multilateral en el que todos puedan participar, muy claro sobre cómo funciona la ciencia; y existe este mecanismo global, que es democrático y donde realmente todos los países tienen que ser parte de él.

Porque los geoingenieros saben, esto está en todos los estudios, que la geoingeniería es profundamente desigual en el sentido de que habrá ganadores y perdedores, y lo dicen abiertamente. Los perdedores serán los países que no puedan decidir. No hay un escenario en el que todos los países se unan y algunos países digan: «Está bien, todo nuestro país desaparecerá, o  nos inundarán, o tendremos una sequía terrible, pero estamos de acuerdo con la geoingeniería solar «. Ese escenario es ridículo, pero eso es lo que están proponiendo.

Dicen “gobernanza internacional” en lugar de decir gobierno multilateral y pleno porque no hay forma de tomar una decisión justa sobre la gestión de la radiación solar que no se base en que todos estén de acuerdo en eso. Ese escenario no existe y ellos lo saben. Se aprovechan de esta cuestión de la inequidad que ya existe e intentan avanzar en diferentes formas de experimentos o incluso discusiones sobre gobernanza que realmente no incluyen a todas las partes como sucedió, por ejemplo, cuando hicieron la moratoria en el CDB.

En el CDB, estaban todos los países y comenzamos la discusión sobre la moratoria, con Rusia y China oponiéndose a la moratoria, pero luego, al final, se debatió (porque Estados Unidos no es parte del Convenio sobre la Diversidad Biológica).Se discutió sobre si “tenemos que tener un enfoque de precaución en esto para que podamos ver cuáles son los impactos antes de que se implemente». Esa fue la decisión que se tomó.

Pregunta: Podría comentar los posibles efectos de la geoingeniería en la biodiversidad, especialmente en el Sur global, pero obviamente también a nivel mundial.

Silvia Ribeiro: Claro, los problemas que muchas de las tecnologías de geoingeniería producirán es un desequilibrio de carbono en el clima y también desequilibrios en los ecosistemas. No nos gusta hablar sobre la “gestión de la radiación solar” y la “eliminación de dióxido de carbono”. Preferiríamos hablar de geoingeniería marina o geoingeniería atmosférica o geoingeniería terrestre porque informa más sobre los impactos que sucederán.

¿Qué sucede si, por ejemplo, implementan la Ocean Fertilization? Creará anoxia, falta de oxígeno en algunas capas del océano. Eso creará problemas en toda la cadena alimentaria marina. Pero también tiene, por supuesto, un impacto mayor en la biodiversidad. Eso también sucederá con muchas de las propuestas tecnológicas: tendrán un impacto localizado en algún lado. Con la gestión de la radiación solar, la única forma en que tenga resultados es implementarla a una escala tan grande, que no se puede implementar sin efectos secundarios. Estos efectos secundarios serán, por ejemplo, crear nuevamente sequías en otros lugares dependiendo de la técnica que se implemente. Este es, por supuesto, un gran problema para la biodiversidad.

Los más afectados en esto no están sólo en el Sur. Las personas que se verán más afectadas son aquellas cuyo sustento se basa en una relación con estos ecosistemas, como las pequeñas pesquerías artesanales, los pastores, los agricultores. Porque la geoingeniería cambiará las condiciones de la radiación solar, pero también los patrones de la lluvia, las sequías. Esto sucederá de una manera que no es la que manejan en sus conocimientos tradicionales. (Pescadores, agricultores) ya tienen problemas con el cambio climático, pero en el caso de la geoingeniería las cosas sucederán de una forma mucho más rápida y drástica.

Eso afectará particularmente a esas personas. Esas son las personas que hoy en día, no sólo son la base principal de alimentos en el mundo (porque la Red Alimentaria Campesina está proporcionando los alimentos para casi un 70% del mundo), sino que también son este tipo de actividades las que están llevando a cabo hacer retroceder el cambio climático. En el sentido de que no están produciendo nuevas emisiones, y  también están cuidando el agua y la tierra de una manera que absorbe más dióxido de carbono. Afectaría a las personas que ya están haciendo la mejor contribución contra el cambio climático.

NOTAS DE INTERÉS EN CASTELANO

Geoingenieros realizan prueba de ingeniería planetaria en Australia

Impactos del Manejo de la Radiación Solar en América Latina

El gran fraude climático: Argumentos contra la geoingeniería